Fotografía: Jordi Pou

Parque Científico y Tecnológico Agroalimentario

La propuesta arquitectónica consistió en rehabilitar tres edificios H (antiguos cuarteles de la ciudad de Lérida) y reconvertirlos en grandes espacios de usos múltiples.

Se reforzó y conservó la idea de los 6 volúmenes lineales existentes, conectados entre ellos, de planta diáfana flexible y abierta a los cambios de uso.

Los edificios se formalizan en un único edificio, mediante la cubrición de los patios exteriores existentes entre edificios con unos invernaderos-umbráculos modulares extraídos directamente del mundo innovador agrícola, que nos han permitido crear un espacio térmico, generador de un microclima que apoya, desde sistemas pasivos de construcción, el confort interior de los edificios. Son estos patios los vertebradores de los edificios y en cierto modo del confort interior. Cada patio se singulariza desde el color y la vegetación.

Las cubiertas de los edificios también son espacio comunitario. En ellas existen salas de reuniones en contacto directo con jardines que almacenan agua de lluvia y que permiten unas vistas a toda la ciudad de Lérida. El agua y las condiciones climáticas de la ciudad de Lérida, en donde el frio y la niebla son protagonistas, han permitido el almacenamiento y utilización de ésta, a partir de la condensación.

Las oficinas se han ido equipando según las necesidades en el tiempo. Unas infraestructuras básicas equipan los espacios de trabajo.

Las fachadas exteriores a los patios han intentado respetar la fisonomía de los antiguos edificios, las texturas, colores y remates. Unas lamas que evitan la radiación solar directa rompen la configuración original pero permiten entender lo anteriormente existente.